Se estima que en Colombia, se practican millones de cirugías plásticas al año. De los procedimientos más sencillos a los más complejos, nuestro hermano país se ha convertido en un paraíso mundial de quienes quieren someterse a procedimientos estéticos de bajo costo y con “aparentes buenos resultados”.
En las grandes ciudades colombianas, destacan Bogotá y Medellín, la proliferación de clínicas dedicadas a la cirugía plástica es enorme. El problema, sin embargo, podría ir más allá del bisturí y estar implantado en el imaginario popular colombiano.
De acuerdo con un reciente artículo del diario El Tiempo, el hecho de que la cirugía estética esté permitida en Colombia a tan corta edad ha generado una parafernalia con respecto al tema y, tristemente, la proliferación de clínicas que practican procedimientos de poca calidad. La cifra de adolescentes que mueren al año es grande.
¿Continuará esta tendencia? ¿Sacrificarían su salud por una cirugía plástica? En Revista Central esperamos sus comentarios.