Redacción: Central
¿Has escuchado de las grasas buenas y malas?
Pues los frutos secos se caracterizan por tener un gran porcentaje de grasas saludables.
Las almendras, las avellanas, las nueces, los cacahuetes, los pistachos y los piñones, son ejemplos de cuales son los frutos secos que puedes comer durante el día.
Algunos de los beneficios de los frutos secos son qué aportan muchos minerales a tu cuerpo, como hierro, potasio, magnesio, zinc y el selenio que sirven como antioxidantes.
Una cantidad adecuada de frutos secos sería uno de tus alimentos ideales para después de realizar actividad física, ya que aportan proteína vegetal.
También son ricos en fibra, por lo que su consumo te ayuda a regular el tránsito intestinal.
Por último y no menos importante, los frutos secos previenen el deterioro cognitivo asociado a la edad y ayuda a preservar la memoria.