Pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida durmiendo. Dormir bien es una gran y difícil tarea que de hacerlo mal, podría traer consecuencias mayúsculas para la mente y el cuerpo.
Si el estimado de vida es de 75 años, de acuerdo con expertos, el tiempo que pasamos durmiendo es de 25 años, en caso de que se cumplan religiosamente las 8 horas de sueño recomendadas por especialistas.
Sin embargo, la vida tan agitada que se tiene hoy en día impide que se cumpla a rajatabla un periodo de sueño recomendable, pasando de dormir 8 horas a solo 5 o 6 horas por noche.
En palabras de la Asociación Mundial de Medicina del Sueño , las jornadas cortas de descanso por la noche es sinónimo de una epidemia global que pone en peligro la salud y la calidad de vida de más del 45 por ciento de la población mundial, pues dormir bien en adición de una dieta equilibrada y el ejercicio regular se traduce en bienestar.

10 consecuencias corporales por no dormir bien
De acuerdo con el estudio, Trastornos del sueño y privación del sueño: un problema de salud pública no resuelto , publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina, la pérdida de sueño (dormir menos de 7 horas por noche) puede tener efectos de gran alcance en los sistemas cardiovascular, endocrino, inmunológico y nervioso.
Es decir, los efectos acumulativos de la pérdida de sueño y los trastornos del sueño se asocian a un mayor riesgo de hipertensión, esclerosis múltiple, cáncer, diabetes, obesidad, depresión, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
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En adición de lo anterior, si eres de los que duermen de 5 a 6 horas, debes saber que una cantidad considerable de células cerebrales mueren (aproximadamente un 25 por ciento), lo que tiene como consecuencia la afectación de las funciones como la disminución del rendimiento en el recuerdo a corto plazo, la supervivencia neuronal y un mal funcionamiento de hormonas.
Por ejemplo, cuando no es la cantidad de horas de sueño ideal se libera menos insulina (encargada de regular el azúcar en la sangre) y el organismo no procesa la glucosa, incentivando el desarrollo de diabetes tipo 2.

Otra consecuencia importante que se tiene cuando no se duerme bien es la baja del sistema inmunológico o su alteración, en otras palabras, se está más expuesto a virus y bacterias. El dormir incentiva, fortalece y equilibra el sistema inmunológico, por lo que ayuda a curar heridas, prevenir infecciones y más.
Y en caso de que las consecuencias anteriores no fueran suficientes, una mala calidad de sueño acelera el proceso de envejecimiento de la piel . De acuerdo con una investigación de la Universidad de California en Los Ángeles, descubrió que una sola noche de sueño insuficiente puede hacer que las células envejezcan más rápido , lo que impide que la piel pueda repararse cuando tiene problemas como manchas de sol y líneas finas de expresión.
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Después de leer las consecuencias que el no dormir lo suficiente le causa a tu cuerpo y mente, seguro querrás programar tu alarma todos los días a la misma hora a fin de completar tus horas de sueño.
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