Omakase es una experiencia culinaria única que cruza la línea entre técnica de cocina y arte. Durante un omakase, el chef cura cuidadosamente cada detalle para ofrecer una experiencia gastronómica memorable y personalizada. Originario de Japón, omakase se traduce como “confiar en el chef”. En este contexto, nos podemos en las manos del chef y confiamos en su habilidad y creatividad para seleccionar y preparar los platillos frescos y deliciosos; cada uno es una sorpresa que refleja la estación, la disponibilidad de ingredientes y la inspiración del momento.
El nuevo restaurante Kotsu, ubicado en el vibrante corazón de la Ciudad de México, en la plaza de la Cibeles se ha ganado una reputación envidiable por su innovadora fusión de la cocina japonesa y mexicana. Este establecimiento ha logrado combinar de manera magistral los sabores y técnicas tradicionales de ambos países, creando una experiencia culinaria única que deleita a los paladares más exigentes.
En Kotsu, cada plato es una obra maestra que refleja la meticulosa atención al detalle propia de la cocina japonesa, al tiempo que incorpora la riqueza de ingredientes y la audacia de sabores característicos de la gastronomía mexicana.
El nombre Kotsu hace referencia a la frase japonesa “Kotsu Kotsu"; el placer de desacelerar, detenerse y disfrutar del momento paso a paso. Los chefs de Onomura crean en este espacio íntimo una celebración de la artesanía culinaria, la conexión con los ingredientes frescos, la mezcla de sabores mexicanos y japoneses, y la confianza mutua entre el chef y el comensal. Desde sushi exquisitamente elaborado hasta pequeñas delicias marinas y platos calientes preparados al momento, cada bocado está destinado a deleitar y sorprender.
A diferencia de una cena convencional, donde elegimos cada plato según un menú preestablecido, en Kotsu confiamos completamente en la visión del chef Ulises Montes de Oca. Aquí, cada detalle está meticulosamente curado para ofrecer una experiencia gastronómica que va más allá de lo esperado.
En este bello e intimo lugar, disfruté un menú de degustación de diez tiempos con platillos excepcionales, como nigiris con trufa, caviar y yuzu; bacalao negro en salsa miso; atún aleta azul en un crujiente de arroz con tinta de calamar y aguacate; finas láminas de carne Wagyu en piedra caliente; y el favorito: el nigiri de enokis japoneses a la mantequilla.
La preparación meticulosa de omakase no solo se centra en la técnica culinaria, sino también en la presentación estética y en la narrativa detrás de cada plato; el origen de los ingredientes, las técnicas empleadas y las tradiciones culinarias que influyen en cada creación son parte esencial de la experiencia. Bajo la filosofía de estar plenamente presente en el momento, Kostu nos inspira a respirar y traer nuestra mente al presente –encontrando placer en cada instante, prestando atención a lo que sentimos en nuestra mente y cuerpo cuando estamos plenamente en el aquí y ahora.
El omakase Kostu by Onomura es una experiencia reservada para aquellos que valoran la autenticidad, la innovación y el placer de descubrir nuevos sabores de manos expertas. Una vivencia memorable, es aquí donde se ha perfeccionado el arte de desacelerar.
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