¿Has estado frente a un lienzo en blanco? Independientemente de su tamaño y dimensiones, ¿creerías que el sentimiento pudiese resultar igual de aterrador, que el tener de frente el examen de admisión a la universidad de tu elección?
A pesar de sentirte una persona preparada, conocedor de diversos temas, estar seguro de ti mismo y con vivencias para regalar, el tener de frente algo, sin saber que esperar o más aún, tener la presión de lo que se espera de ti pone, hasta el más preparado, en una posición incómoda, por no decir aterradora.
Artistas suelen capturar momentos como estos, sin embargo, son pocos que los que han logrado inmortalizar ese sentimiento de miedo aterrador. No me refiero a obras que produzcan el sentimiento del miedo, esas hay una infinidad. Sin embargo, la obra que considero la más famosa en representar lo que digo, cara de “OMG”, sería la obra El Grito, del artista noruego Edvard Munch. En esa obra, el personaje sigue vivo, pero el alma desaparece de su ser y la inseguridad toma control (o por lo menos así lo percibo). Curiosamente, todas esas sensaciones surgen de la mente y no necesariamente de lo que este sucediendo en tiempo real.
Hablamos de un lienzo en blanco, pero igual podría ser una hoja en blanco para un escritor, un pedazo de material para un escultor, una pantalla vacía para un diseñador. Esa dualidad de querer hacer lo que se nos antoje, pero que a la vez tiene como sombra la aceptación o rechazo del público que lo vera, es lo que no nos permite ser del todo libres.
Me pregunto si los adultos influimos en que nazca esa emoción, para convertirse en un sentimiento, o es algo natural que tarde o temprano se presenta conforme vamos creciendo y reconociendo el mundo que nos rodea, y que, por ende, llevamos como cicatrices de guerra en nuestro interior.
Si no te identificas, por favor comparte con el que se deje, esa fluidez, libertad y ausencia de miedo, con la que deambulas por el mundo. Esa actitud envidiable me hace recordar a Poppy en el mundo mágico, colorido e imaginario de la película Trolls, la troll más feliz del mundo. Personaje que no le importan las consecuencias y mucho menos las apariencias.
Así que sin pensar tanto, pongamos manos a la obra, usemos la disciplina y constancia para vencer esos miedos y aunque nos gusta sentirnos vivos, con sus vastas emociones, en lo personal optare por limitar las mías a los que me hagan sonreír. ¿Y tú?
Para descubrir más sobre estos pequeños grandes artistas, síguenos en A_deArte_:
Instagram:
@A_deArte_
Podcast en Spotify:
A de Arte
Informes:
contacto@adearte.com.mx
Lee más de A de Arte, de Mónica Alonso y Victoria González aquí.
Suscríbete aquí a nuestro Newsletter para que estés al día con nuestros contenidos.