En la actualidad, hemos generado una mayor conciencia sobre términos ofensivos, además de ciertos comportamientos que pueden afectar de forma negativa a otras personas, sin embargo, hace no mucho tiempo esto era muy diferente. A pesar de que estos son temas muy delicados, la historia no puede ser borrada, aunque sí puede ser, aparentemente, alterada en la literatura, tal y como ha sucedido con la obra de Agatha Christie.
Conocida como “la Reina del Crimen”, Christie nació el 15 de septiembre de 1890 y fue una de las escritoras más importantes dentro de la novela de detectives desde el inicio de su carrera, en 1920, hasta su muerte, el 12 de enero de 1976. El tiempo que estuvo activa, Agatha Christie publicó 66 trabajos de este género, además de 14 recopilaciones de historias cortas, con personajes icónicos como Miss Jane Marple o Hercule Poirot.
Por más de 50 años, Agatha Christie permaneció activa, sin embargo, fue más de 100 años después de su primera publicación que la editorial HarperCollins confirmó que toda la obra de “la Reina del Crimen” será cambiada, con la finalidad de quitar palabras ofensivas o estereotipos raciales que en la actualidad pudieran ofender a algunas personas.
Estos trabajos han sido alterados, cambiando estos términos a algunos más inclusivos, o borrando ciertas frases, e incluso, desapareciendo párrafos enteros, tal es el caso de la obra publicada en 1964, titulada Misterio en el Caribe, donde borraron una sección entera donde un personaje no puede ver a una mujer en la oscuridad debido a su color de piel.
Dicha labor fue realizada por lectores de sensibilidad, quienes tiene la tarea de revisar una obra con detenimiento para encontrar cualquier pista de temas que puedan ofender a un individuo o grupo de personas. Estos profesionales fueron contratados por HarperCollins para ubicar cada una de estas situaciones, cuyas correcciones saldrán a la luz en las reediciones de la obra de Agatha Christie.
Debemos tener en cuenta que en los tiempos en los que la escritora realizó su trabajo, estos términos no eran mal vistos, y eran comúnmente usados por las personas en general, aunque en la actualidad si es una realidad que debemos alejarnos de estos, debido a las connotaciones negativas en la historia del mundo.
La decisión de la casa editorial de reescribir la obra de Agatha Christie de forma casi total ha generado mucha polémica entre el público lector, pues la mayoría afirman que esto es una forma de censura, además que estos registros deben existir como ejemplo de los reflejos negativos de la sociedad en el pasado, y aprender de ellos, no esconderlos solamente.
Agatha Christie no ha sido la única autora que ha sufrido este tipo de alteraciones, el mismo caso se llevó a cabo con el autor Roald Dahl, cuyas obras fueron alteradas para agregar un lenguaje más inclusivo, como en Charlie y la Fábrica de Chocolates, donde ahora se describen a los Oompa Loompas como “personas pequeñas”, en lugar de “hombres pequeños”.
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