Las zonas arqueológicas son lugares de infinita riqueza cultural y visual, no solo porque son los cimientos de nuestras raíces, también por lo espectacular y maravillosas que lucen las edificaciones que ofrecen a turistas extranjeros y nacionales vistas espectaculares del México antiguo, nuestra conexión con el pasado.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) bajo su resguardo permanecen 193 zonas arqueológicas y una paleontológica abiertas al público en todo el territorio mexicano, de las cuales las más conocidas e importantes son Chichén Itza en Yucatán, Palenque en Chiapas, El Tajín en Veracruz, Teotihuacán en el Estado de México, Monte Albán en Oaxaca.
Algunas de ellas (a excepción de Teotihuacán) se encuentran a más de dos horas de la Ciudad de México, son un destino imperdible durante las vacaciones para disfrutar sin duda del clima de la zona y la gastronomía, sin embargo, no son opción cuando se trata de escapar del bullicio citadino en un fin de semana normal como cualquier otro pero en el que queremos salir a despejarnos, por eso te damos 5 opciones de zonas arqueológicas que bien puedes visitar en un trayecto por carretera sin desperdiciar mucho tiempo.
1. Tula
A tan solo hora y media de la Ciudad de México se encuentra Tula de Allende, un municipio del estado de Hidalgo que conserva la zona arqueológica considerada en el año 650 como la gran capital del altiplano central de Mesoamérica.
Tula es muestra de edificios públicos, plazas, calzadas y abundantes esculturas policromadas, en la parte superior de la pirámide se encuentran las míticas columnas colosales que vimos en la escuela en el libro de historia y que se erigen como centinelas divinos de la zona, miden más de 4.5 metros de altura y están labrados en bloques de basalto ensamblados.
Entrada general: $80 pesos.
Cuota por cámara de video
Descuento: INAPAM, estudiantes y maestros
Cuenta con visitas guiadas, módulo de información, estacionamiento, sanitarios y acceso a sillas de ruedas.
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2. Teopanzolco
Morelos no solo cuenta con el Tepozteco en Tepoztlán, cuenta con otras siete zonas arqueológicas que valen mucho la pena visitar, una de ellas es Teopanzolco, un lugar que en tiempos prehispánicos fungió como un importante centro político-religioso. Sus habitantes se asentaron en la ciudad debido a que migraron del mítico Aztlán.
En esta zona encontrarás similitudes con las edificaciones de Tenochtitlan, pues sus templos más importantes de Tlaloc y Huitzilopochtli fueron construidos a la imagen del templo mayor.
Entrada general: $55 pesos.
Horarios: Lunes a domingo de 9 a 17:30 hrs.
Cuenta con sanitarios, área de descanso, visitas guiadas y servicios educativos.
3. Cantona
En el estado de Puebla existen ocho ciudades arqueológicas que resultan una maravilla, una de las más conocidas se encuentra en el municipio de San Pedro Cholula, sin embargo, existen otras menos visitadas pero igual o hasta más impresionantes como lo es Cantona, ubicada en el municipio de Tepeyahualco y considerada por el INAH como una de las ciudades prehispánicas más antiguas de México.
En la parte más alta se encuentra la acrópolis, donde aún existen las principales estructuras de los poderes político, económico y religioso, y las viviendas de sus líderes. La ciudad está formada por patios, juegos de pelota, talleres de obsidiana, templos, calzadas y calles amuralladas, que le permitían ser una fortaleza en época de conflictos e invasiones.
Entrada general: $60 pesos.
Horarios: Martes a domingo de 9 a 17 horas.
El Museo de sitio de miércoles a domingos de 9 a 18 hrs.
Elige recorrer alguna de estas 3 maravillas de nuestro México, ¡no olvides usar zapatos cómodos, sombrilla y bloqueador solar!
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