Incontables son los dólares y los bienes materiales que celebridades de Hollywood y millonarios enlistan en su jugosa herencia, pese a que podría pensarse que una vez llegado el momento de su muerte pasarán a manos de los integrantes de su familia, la realidad es que los herederos son personas externas, fundaciones, asociaciones de beneficencia y más.
Gordon Ramsay
El chef que maravilló al mundo con sus platillos, ha ganado más de 10 estrellas Michelin en su carrera de las que conserva siete. Su fama ascendió como la espuma gracias a que es dueño de varios restaurantes y presentador de televisión en Reino Unido.
No existe una cifra exacta de la fortuna que hasta ahora ha logrado acumular, pero una cosa sí es segura, sus hijos no serán afortunados para conservar los logros económicos y materiales de su papá, Ramsay ha confesado a distintos medios británicos que su familia debe ingeniárselas para ganarse la vida y no depender de él. Aún es incierto cuál será el paradero de su cuantiosa fortuna una vez que llegue el momento de partir de este mundo.
Daniel Craig
El actor de Hollywood famoso por darle vida al Agente 007 cuenta con una fortuna de más de 145 millones de euros (que asciende cada vez más). Ha confesado en múltiples ocasiones que ni sus hijas, ni sus parientes más cercanos recibirán euro alguno estipulado en su testamento. Su argumento para no heredar su dinero se basa en que es de “mal gusto” hacerlo.
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Simon Cowell
El multimillonario Cowell ha declarado que su hijo Eric no será el beneficiario en su testamento, la idea es dejar su fortuna a una organización benéfica que tenga como causas principales niños y perros. El integrante del jurado del programa Factor X piensa que su hijo debe construir su propio éxito sin ayuda de sus papás.
Condesa de Lucan
La viuda de John Bingham, quien falleció a causa de una peligrosa combinación de drogas y alcohol, negó poner los nombres de sus hijos y parientes cercanos en su testamento, dejando los más de 670 millones de euros a Shelter, una organización benéfica para personas sin hogar.
Colin Tennant
Lord Glenconner, un aristócrata británico sufrió de un ataque de corazón y murió en el acto. Cuestión por la que su esposa dama de compañía de la princesa Margarita, hermana de la reina Isabel II, decidió reclamar la herencia de más de 25 millones de euros que sabía su esposo tenía, sin embargo, su sorpresa fue tal al ser notificada que ni ella, ni sus hijos recibirían moneda alguna, pues Colin había dejado como heredero universal a Kent, un ayudante personal que lo cuidó hasta su muerte.
Años más tarde, su nieto Cody, consiguió recuperar la mitad del patrimonio de la familia, después de siete años de problemas legales.
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