Ruta sustentable con Edu Vasat y la nueva Land Rover Evoque Híbrida

Si te gusta comer con responsabilidad ambiental y además delicioso , pon atención a esta ruta de lugares sustentables, que seguramente te van a encantar.

Obviamente hicimos este recorrido a bordo de un auto eco-friendly con la nueva Land Rover Range Rover Evoque híbrida, y que mejor invitado que Edu Vasat, especialista en el medio automotriz y además amante de todo lo sustentable, quien nos explicó las virtudes de un auto híbrido.

Tiene dos motores, uno de combustión y un motor eléctrico que se alimenta de una batería de 15 kw de capacidad, que se puede cargar desde una toma de corriente en casa, o en algún centro de carga en centros comerciales. Se carga de 1 hora a 1 hora 40 minutos.

Con este Evoque puedes recorrer hasta 65 km solo con electricidad, osea ¡cero emisiones!

La batería se recarga al acelerar o frenar, pero hay que hacerlo de forma prudente para aprovechar las prestaciones de la misma, porque si lo haces de forma brusca, le estarás pidiendo más energía al auto, y esto hace que tenga que proveer energía tanto de la batería como del motor de combustión.

Obviamente queríamos saber la diferencia de emisiones generadas entre esta Land Rover Evoque híbrida y un auto equivalente normal pero con un motor de combustión interna, y comprobamos que, definitivamente es un auto respetuoso con el medio ambiente. Mientras un auto de motor normal emite entre 100 gr-120 gr de CO2 por km recorrido, esta Evoque emite solamente 32 gr de CO2 por km.

Y si pensabas que esta Evoque por ser sustentable es un auto básico, quiero decirte que es todo lo contrario, estéticamente me encantó, está totalmente equipada, tiene toda la tecnología y seguridad, además tiene 3 niveles de manejo en modo ECO e incluso tiene tracción 4x4.

Y teniendo en cuenta estas características sustentables del auto, hicimos la ruta sin remordimiento a los siguientes lugares:

Nuestro primer punto fue Tetetlán, un espacio ubicado en el mero corazón del Pedregal de San Ángel, donde se combina la gastronomía, el arte y la arquitectura dentro de una parte de la Casa Pedregal, una hermosa construcción hecha y habitada por el arquitecto Luis Barragán.

Desde que entras te sientes como en una cueva, pues todo está rodeado de piedra volcánica, desde las paredes hasta el piso, el cual se ve por debajo de un cristal, de ahí el significado del nombre de Tetetlán “lugar entre muchas piedras”.

Más del 90% de los ingredientes son de origen local, orgánico y sustentable. La carne es de libre pastoreo, el café proviene de Veracruz, la pesca totalmente fresca desde Ensenada, tasajo y tlayudas de proveedores de Oaxaca, además productos siempre frescos que provee diariamente Arca tierra, una organización de chinamperos de Xochimilco.

Con todos estos productos frescos y locales, los platillos son de lo mejor, nuestra recomendación son el huarache, la sopa de tortilla y el salmón salvaje.

Ubicación: Av. de Las Fuentes 180 - B, Jardines del Pedregal.

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La segunda parada eco-friendly fue en la Colonia Juárez, en Eno, un restaurante (casual) que ofrece comida mexicana.

Y no podíamos dejar de pasar por este lugar donde ponen mucha atención al medio ambiente con más del 80% de sus productos orgánicos. Tienen un comercio responsable, donde apoyan a proveedores locales, como Gaia, que suministra a Eno con frutas y verduras de temporada.

Gracias a esto los platillos tienen esa sazón “como en casa”. Si van a la hora de la comida, no pueden dejar de probar las albóndigas a la mexicana, rellenas de queso manchego y la tinga de pollo. También tienen que pedir las aguas frescas o la horchata de temporada.

Si su idea es ir por algo más relajado, tienen mezcal y vino de la casa, que si lo combinan con un hummus de garbanzo y un guacamole de hierbas no se van a arrepentir. Y si quieres ir solamente por un café, no olvides pedir uno de sus panes dulces, nuestro favorito el garibaldi. Toda la panadería está hecha en el mismo lugar.

Ubicación: Tokio 110, colonia Juárez.

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Y nuestro último punto fue en Ojo de Maíz, ubicado en la zona más trendy de la CDMX, donde podrás encontrar gastronomía Mexicana para veganos, con productos 100% orgánicos.

Un lugar respetuoso con el medio ambiente. Todos sus productos provienen de huertos sustentables y tienen alianzas con varios proveedores mexicanos, como Omehuerto.

Además la mayoría de la merma de productos frescos, como fruta y verdura, se regresa a los huertos y ahí lo reutilizan como composta en los huertos.

Dentro del restaurante utilizan gran porcentaje de material biodegradable, lo cual los hace todavía más eco-friendly.

Algo que me encantó de Ojo de maíz, es que puedes comer delicioso aunque no seas vegano o vegetariano, como unos molotes de plátanos con chorizo vegano, o unas enchiladas de mole rellenas de flor de Jamaica, o qué tal unos tacos de pastor hechos con setas, te prometo que saben como si fueran reales.

Y si eres de los que no se van sin comer postre, el arroz con leche de coco bruleé y el panqué de elote con helado de palomitas, los vas a amar!

Ubicación: Citlaltéptl 23 F, Hipódromo Condesa

Y ahora sí, nos vamos contentos de conocer la sustentabilidad en varios lugares y de haber probado platillos tan ricos, pues como dicen panza llena, corazón contento.

Agradecimiento especial a:

Edu Vasat y Land Rover México .

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