Cuando hablamos de anticonceptivos para hombres, usualmente pensamos en la vasectomía y el condón, pero cuando señalamos algunas medidas más experimentales, la reacción de la población masculina suele ser dividida, especialmente cuando se trata de hormonas o inyecciones, que se han convertido en un tema tabú.
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Sin embargo, la distribución de métodos anticonceptivos diferentes para hombres es una realidad, o por lo menos, lo será muy pronto, y es que varios laboratorios están desarrollando alternativas al condón, que pueden revolucionar la forma en la que el hombre pueda decidir o planificar su vida sexual, aunque estos se contemplan para el 2030, aproximadamente.
Al analizar los métodos anticonceptivos masculinos actuales, tenemos de forma principal el condón, que es uno de los más eficientes en general, protegiendo a las parejas de enfermedades de transmisión sexual, además de tener una alta efectividad para prevenir el embarazo.
Por otro lado, algunas mujeres pueden experimentar rozaduras a causa de la fricción con los materiales elaborados, como el látex, que también puede provocar alergias u otras reacciones indeseables durante la relación sexual.
Así mismo, existen varios pretextos, que suelen usarse como justificaciones para no utilizar este método, por ejemplo, que “no se siente igual” o que el condón “aprieta”, que están ligados a mitos y una mentalidad machista, además de una posible falta de educación sexual.
En el caso de la vasectomía, es un método anticonceptivo sumamente efectivo, y aunque es reversible, dicho proceso es caro y complicado, que no siempre es eficiente y puede causar infertilidad permanente.
Dicho esto, resulta excelente tener a la mano más opciones, especialmente para quitar el peso del control natal exclusivamente a las mujeres, aunque la mayoría de los hombres temen al uso de métodos anticonceptivos a partir de las ideologías con las que hemos crecido, especialmente porque la mayoría piensan que emplearlos los puede hacer “perder la hombría”.
Los métodos anticonceptivos para hombre que se encuentran en desarrollo se enfocan en detener la espermatogénesis, es decir, frenan el proceso de producción de espermatozoides, ya sea en pastillas anticonceptivas, gel o inyecciones.
Hasta ahora, la solución que mejores resultados ha dado, ha sido el gel tópico, que se unta en los brazos y hombros, liberando una versión sintética de progesterona, además de regularizar los niveles de testosterona, para reducir la producción de esperma, por si fuera poco, los efectos secundarios son mínimos, y pueden ser aumento de peso, acné, baja de líbido y cambios de humor.
También se está trabajando en vasectomías temporales, donde inyectan un gel que bloquea los conductos, al igual que la tradicional, solo que este eventualmente se disuelve, permitiendo el paso de los espermatozoides nuevamente.
De acuerdo a un estudio publicado por Nature Communications , se está trabajando una píldora masculina que se debe tomar 30 minutos antes del coito que inmoviliza los espermas, que mueren al poco tiempo que quedar dentro de la vagina.
Los hombres debemos considerar estas alternativas, pues mientras que una mujer se puede embarazar una vez cada 9 meses, los hombres pueden fecundar a 2430 mujeres en este mismo lapso de tiempo.
¿Tú utilizarías alguno de estos métodos anticonceptivos para hombres?
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