Las catedrales góticas hoy son testimonio de uno de los periodos más activos artísticamente (aunque la Edad Media tenga la mala reputación de ser una era oscura, aunque aquí entre nos, no es verdad), estas magníficas construcciones tienen un origen claramente religioso, así como artístico y social. Acá te vamos a contar más sobre ellas y cómo leerlas para tu próxima aventura medieval.
Si nos atrevemos a entrar brevísimamente en una lección histórica, todo comienza con la caída del feudalismo, el sistema social medieval en el que reyes otorgaban tierras a nobles y campesinos las trabajaban (pensemos en Robin Hood y ya estamos situados en el momento), en fin, este sistema empieza a desmoronarse con el auge del comercio y la burguesía, las ciudades emergieron como nuevos centros de poder, dando paso a las catedrales.
Entonces, entendemos que se comenzaron a construir no solo como una glorificación a Dios y el poder de la iglesia, sino como una respuesta a una época de muchos cambios culturales, políticos y económicos. En el proceso de construcción participaban la iglesia, la burguesía, los gremios (grupos de artesanos y comerciantes) así como la comunidad en general, eran y aún son, motivo de orgullo, de hecho las ciudades competían entre sí por quién tenía la catedral más grande y bella de todas.
En palabras de Victor Hugo sobre la catedral más famosa de todas Nuestra Señora de París “los mayores y más grandes productos de la arquitectura son menos obras individuales que obras sociales; más bien la creación de un pueblo que trabaja que la chispa de un hombre genial.”
Arquitectura gótica
Ahora bien, ¿qué es la arquitectura gótica? Comenzamos a verla entre los siglos XII y XV en Europa y es una expresión artística así como inmensamente tecnológica. Son reconocidísimas por su monumentalidad, un diseño que siempre buscaba la luz y su compleja decoración.
Las catedrales, como Ciudad de Dios en la Tierra, buscaban acercarse al cielo con su altura, mientras la luz, símbolo de lo divino, inundaba sus interiores a través de vitrales y rosetones, además encontramos algunos elementos increíbles como los famosos arcos apuntados u ojivales o el uso de columnas altas y esbeltas.
Hay en sus elementos arquitectónicos también algunas maravillas que permitían que el edificio pudiera levantarse tan alto como fuese posible: las bóvedas de crucería, que distribuyen el peso del techo, permitiendo estructuras más altas y espacios abiertos, los famosos contrafuertes y arbotantes, brazos que conectan los contrafuertes externos con el edificio que permiten levantar estructuras más altas y distribuir el peso.
Y más allá de ponernos extremadamente técnicos con los elementos de una catedral gótica, es importante entender que todo tiene un significado, vamos a digerir un poco los simbolismos: ¿sabías que los altares se orientan hacia el este? Y esto es porque de este lado sale el sol todos los días, que en la tradición significa la resurrección de Cristo, esto quiere decir que la entrada principal es hacia el oeste, que representa el paso del creyente desde la oscuridad hacia la luz, es también por esta razón que cruzamos o peregrinamos largos pasillos para llegar al altar mientras observamos retablos, pinturas, esculturas y vitrales que nos enseñan el camino.
Ahora, a la forma de la iglesia se le llama planta y si nunca lo has notado, tiene forma de cruz, y esto es porque nos muestra literalmente el cuerpo en crucifixión de Jesucristo, el pasillo largo, llamado nave, representa el cuerpo, los brazos llamados crucero son los brazos y el altar, la cabeza.
Según Rudolf Schwarz, arquitecto y urbanista alemán “la iglesia no es una mera sala de reuniones; es una imagen del cuerpo místico de Cristo.” ¿Te has fijado que donde cruzan los brazos y la nave suele estar un domo o una torre? He ahí, el corazón de la catedral.
Y si decides bajar, encuentras la cripta. Normalmente está bajo el altar mayor y funciona como el punto de entierro para figuras religiosas importantes. Son áreas subterráneas que simbolizan la fundación de la fe cristiana, así como el ambiente frío, silencioso que nos recuerda la humildad y mortalidad de nuestras vidas.
Los simbolismos en la Catedral de Chartres
Vamos a pensar en ejemplos específicos de catedrales, en primer lugar la Catedral de Chartres, que debes de tener en tu bucketlist porque sus vitrales son para morirse. Se construyó entre 1194 y 1220, como todas las catedrales no toda la construcción pertenece al periodo gótico, también hay otros estilos combinados dentro de ella.
Las vidrieras fueron creadas durante este primer periodo y se han mantenido en pie desde entonces. Son 176 en total y se distribuyen por toda la catedral, es una de las colecciones más grandes de vidrieras medievales conservadas.
Uno de los aspectos más importantes de éstas es el uso del “azul de Chartres” un color profundo e intenso que atrapa la luz. La página web oficial de la Catedral de Chartres nos explica el simbolismo de éstas de una manera muy sencilla: “Las vidrieras se parecen al Hombre: cuando las miras desde fuera, no ves más que una apariencia grisácea, oscura y polvorienta; cuando es atravesada por la luz, la de Dios, revela imágenes, historias, sentidos, símbolos; luego colorea e ilumina lo que lo rodea, y si falta un trozo de vidrio, el mundo se empobrece y se vuelve diferente.”
Recuerda que los elementos decorativos de las catedrales sirven para educar a los fieles que las visitan, por lo que en Chartres decidieron ilustrar los libros de la Biblia. La más famosa está en el transepto sur y muestra el Árbol de Jesé, que es el linaje de Jesús desde Jesé, padre del Rey David. También puedes encontrar temas como la Anunciación, los milagros de Jesús, la Coronación de la Virgen y la Crucifixión.
De la misma forma, hay vidrieras dedicadas a santos como San Pedro, San Pablo y Santa Ana, a quien se le rendía culto en Chartres. Algo súper curioso es que los gremios al ser patrocinadores también están representados, por ejemplo, una donde se muestra el proceso de amasar y hornear pan. Hay tres rosetones con su propio significado, al norte está dedicado a la Virgen María, al sur Cristo en su gloria y el ubicado en la fachada principal, simboliza el Juicio Final.
Y como un gran fun fact: las vidrieras fueron cuidadosamente desmontados, pieza por pieza y almacenados en lugares seguros, lejos de Chartres, para evitar que fueran dañados por los ataques aéreos o saqueados durante la ocupación alemana de la Segunda Guerra Mundial.
Catedral de Notre Dame de París
Por último, hablemos de nuestra Catedral consentida la Catedral de Notre Dame de París, construida entre 1163 y 1245 es una de las catedrales góticas más antiguas del mundo. En toda su historia ha sufrido grandes transformaciones, entre ellas y de manera más reciente, la reconstrucción que atravesó tras el incendio del 2019.
Sobre la puerta principal de la fachada occidental existe una de las obras maestras de la escultura gótica: El Tímpano de la Puerta del Juicio Final, colocado entre 1220 y 1230. Se divide en franjas horizontales, o en su término técnico, registros, y en cada uno se representa una escena diferente.
En el registro superior está Cristo en Majestad, es decir, sentado en un trono y rodeado por un óvalo que simboliza la divinidad (que por cierto se llama mandorla), además en esta ocasión es el juez mientras que a su alrededor puedes ver a los ángeles sosteniendo los instrumentos de la pasión, como la cruz o la lanza. De rodillas, la Virgen María y San José.
En el registro central, justo debajo de Cristo está representada la escena del juicio. San Miguel Arcángel está pesando las almas en una balanza que los demonios están tratando de manipular jalando de ella para poder llevar más almas con ellos. Aquellos humanos que están siendo juzgados miran hacia el cielo con esperanza o hacia abajo conscientes de su destino.
Abajo en el registro inferior, podemos ver la Resurrección de los Muertos, donde se levantan de sus tumbas en respuesta al llamado de los ángeles. A los lados del tímpano están las figuras de santos, obispos y ángeles que esperan interceder o participar en el Juicio.
Junto a las puertas, en las jambas, hay seis figuras de cada lado, que representan a los doce apóstoles. Éstas fueron destruidas en 1792 por los revolucionarios pero durante la reconstrucción del arquitecto Viollet-le-Duc en el siglo XIX fueron colocadas en sus lugares originales.
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