Plantas carnívoras, ¿en verdad comen carne? ¿Son peligrosas para nosotros o nuestras mascotas? Vamos a cambiar la concepción que tenemos sobre las plantas carnívoras, porque entre mitos, leyendas y películas de terror, las podemos percibir como algo peligroso. La realidad es que son plantas fascinantes llenas de trucos para sobrevivir.
Qué son las plantas carnívoras
Las plantas carnívoras son iguales a las demás plantas, solo que su dieta es un poco peculiar, igual que su aspecto. Estas especies vegetales son originarias de lugares donde la tierra no es muy fértil, como pantanos y zonas rocosas, por lo que debieron obtener nutrientes de otras fuentes; y los encontraron en insectos y animalitos pequeños. ¡Eso es poder de adaptación! Y no, ninguna come animales grandes ni humanos.
Que comen las plantas carnívoras
Las plantas carnívoras generalmente consumen insectos pequeños como moscas, arañas y grillos, por eso también se les llama insectívoras. Estas plantas han desarrollado mecanismos bastante increíbles para cazar a sus presas. Como no pueden perseguirlas, primero deben llamar su atención para que ellas solas se acerquen, y esto lo logran por medio de colores intensos y brillantes como verde, morado, rojo, amarillo, azul. Si vemos fotos de ellas, vamos a notar que tienen un aspecto único y extravagante, justo lo que provoca que los insectos se acerquen a investigarlas. Ya que lograron que las posibles presas estén lo suficientemente cerca, –como no pueden estirarse para alcanzarlos, como lo harían un camaleón o un sapo con su lengua–, ahora deben hacer que la presa se pose sobre ellas y para eso producen un néctar dulce y apetitoso, que se le antoje lo suficiente al insecto para que cuando intente beberlo, caiga en la trampa de donde ya no será nada fácil escapar. Una vez ahí, los insectos mueren por cansancio al intentar escapar sin éxito o por asfixia quedando sumergidos en los jugos digestivos de la planta. Una vez digerido por las enzimas o bacterias del jugo, la planta absorbe los nutrientes resultantes del caldo de insecto. Todo esto para comer y sobrevivir. ¡Son verdaderas guerreras!
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Tipos de plantas carnívoras
Hay más de seiscientas especies de plantas carnívoras y se clasifican en tres grupos según el tipo de trampa que usan para atrapar su alimento; tienen diferentes técnicas. Por un lado, hay algunas que tienen hojas dispuestas como pinzas –como la Venus atrapamoscas, que es la más común y que la mayoría de nosotros conocemos– que en cuanto perciben que hay una presa entre sus hojas se cierran rapidísimo para mantener al insecto dentro y ahí mismo lo digieren. Otra de las trampas mortales que utilizan es los filamentos o pelos pegajosos. Estas plantas carnívoras tienen en sus hojas gotitas de una sustancia dulce que es muy pegajosa, una vez que el insecto intenta alimentarse de ella, queda pegado a la planta hasta que muere. Y, por último, están las plantas con trampa de “jarra”. Estas carnívoras tienen estructuras muy llamativas que parecieran flores en forma de jarrones llenos de líquido dulce para que sus presas “se alimenten”, y una vez dentro de la trampa, ya no hay salida.
Cuidados de las carnívoras
Si te estás decidiendo por tener una carnívora en casa, aquí te dejamos algunos consejos generales para cuidarlas, aunque cada especie puede tener preferencias diferentes; es importante investigar sobre la especie particular que tengamos. Son algo delicadas, deberás estar un poco más al pendiente de ellas.
Como ya lo hemos platicado en otras publicaciones, cuando tenemos una planta en casa, fuera de su hábitat, debemos asemejar lo más posible sus condiciones naturales. Considerando que vienen de una zona húmeda, calurosa y poco fértil, debemos mantenerlas con mucha luz, pero no directa, con bastante humedad y en un lugar donde pueda atrapar algunos insectos de vez en cuando.
TIP de ubicación: Las ventanas de la cocina suelen ser lugares bastante cómodos para ellas.
Es preferible regarlas con agua purificada ya que el agua de la llave contiene muchos elementos, particularmente cloro y calcio, a los que no están acostumbradas, y podría hacerles daño o dificultar su desarrollo.
TIP de riego: Ponle un plato debajo de la maceta y mantenlo siempre con un poco de agua purificada para mantener la humedad sin que la tengas que regar diario. También les gusta el rocío, puedes atomizarla de vez en cuando.
Es importante que la maceta no sea de barro porque con el agua del riego se pueden disolver algunos minerales que no le van a gustar a tu planta. Es mejor usar plástico o cerámica.
TIP de sustrato: Nunca vayas a plantar una carnívora con tierra de jardín, tiene demasiada materia orgánica y sales. Si no consigues sustrato especial para ellas, prepáralo tú mismo mezclando musgo para mantener la humedad y arena que permitirá la aireación y evitará encharcamientos dentro de la maceta.
En cuanto a su peculiar dieta, solo debes acercarla a donde pueda cazar. No es necesario que la alimentes, ella lo hará por sí misma. De hecho, puedes hacerle daño si lo haces. Aunque si no te resistes a ver el proceso, puedes darle una mosquita, hormiga o araña pequeña para quitarte la curiosidad, pero no lo hagas un hábito, evita jugar con sus trampas porque se va a estresar.
TIP de temperatura: les gusta estar calientitas, si estás en una zona fría o la temperatura baja mucho por las noches, cierra la ventana o cámbiala de lugar en lo que sube la temperatura.
Esperamos que te animes a tener una planta carnívora en casa. Aunque necesitan bastantes cuidados nos recompensan con su aspecto mágico.
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