En la década de los 70, el cine mexicano estaba pasando por una temporada bastante curiosa, donde el género dominante era la comedia picante de ficheras, al mismo tiempo, la fama de Xavier López “Chabelo” estaba en su pico máximo tras el éxito de su programa, En Familia con Chabelo, que estrenó el 26 de noviembre de 1967.
Con esto en mente, el comediante, que inició su carrera cinematográfica en 1958, quería extender sus horizontes, regresando a la pantalla grande, esta vez con un papel protagónico, así es como surgió la saga de Chabelo y Pepito, que nos entregó 3 películas, que se han vuelto clásicos del humor blanco en México.
Tras realizar un casting, Martín Ramos Arévalo se convirtió en Pepito, el niño que acompañaba a Chabelo en una trilogía de aventuras que resultaron bastante entretenidas; aunque poco se sabe del pequeño actor, quien dejó de actuar al terminar este periodo; entregándonos las cintas Pepito y la lámpara maravillosa, Chabelo y Pepito contra los Monstruos y Chabelo y Pepito detectives.
Dentro de las tres películas, la primera no tiene continuidad con las demás, sin embargo, en las dos siguientes, nos enteramos de que Chabelo y Pepito son primos, además que se explican algunos detalles, como que Chabelo tiene un desarrollo producido por un metabolismo celular acelerado de complexión estructural múltiple, y es por ello que se ve mayor que los demás niños (está “hiperdesarrollado”).
Pepito y la lámpara maravillosa
En esta cinta comienzan las aventuras de Pepito, quien recibe un castigo después de hacerse pipí en el piso de la escuela, por lo que debe escribir un ensayo sobre las salseras, por lo que compra con un ropavejero lo que parece ser una de estas herramientas, sin embargo, es eh realidad una lámpara mágica.
De este artefacto, surge Chabelo como un genio, quien cumple los deseos que Pepito le pida, aunque empiezan a complicarse las cosas cuando se involucra el padrastro del pequeño protagonista, quien descubre la lámpara maravillosa y trata de quitársela al joven estudiante.
Chabelo y Pepito contra los monstruos
Esta es la película más conocida de esta trilogía, y nos lleva por una aventura que ocurre mientras Chabelo y Pepito (aquí ya son primos) van a un campamento de Boy Scouts, y tras separarse del grupo, son perseguidos por un gorila, y tras correr a toda prisa, descubren una cueva con una momia adentro, después de huir, se encuentran con el monstruo de la laguna negra, que empieza a combatir con el primate, que no había perdido la pista de los protagonistas.
Después de descubrir que Chabelo y Pepito han desaparecido, el resto de los scouts deciden ir en su búsqueda, para encontrar una especie de castillo, donde son atacados por el monstruo de Frankenstein , para descubrir que estas criaturas son realmente robots diseñados para cuidar esta fortaleza.
Chabelo y Pepito detectives
Esta secuela directa de Chabelo y Pepito contra los monstruos convierte a los protagonistas en detectives, quienes son reclutados por la policía para investigar una serie de desapariciones de niños en la zona, por lo que los primos deciden hacerse pasar por delincuentes, para después ser reclutados por una banda criminal compuesta por niños.
Después de unirse a este grupo, Chabelo y Pepito comienzan a sobresalir, por lo que son llevados a la base principal de este grupo, y es aquí donde encuentran a los niños secuestrados, a quienes les lavaron el cerebro para seguir todo tipo de órdenes.
Mientras se introducen más en este complejo, descubren que quienes están detrás de todo son unos extraterrestres, que llegaron a la Tierra en son de paz, sin embargo, fueron convencidos por el villano de la película anterior de unirse al mal, pero Chabelo y Pepito comienzan a liberar a los niños con la ayuda de un extraterrestre que no está de acuerdo con los métodos de estos personajes.
La saga completa de Chabelo y Pepito se ha convertido en un clásico del cine mexicano, aunque no brillen por ser excelentes, seguramente las risas no faltarán en este maratón.
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