- Limpieza y desinfección
Tu equipo fotográfico y accesorios de apoyo estarán expuestos cuando los utilices y muevas de un lugar a otro, por lo tanto, debes realizar una limpieza antes y después de cada sesión, en conjunto con el lavado frecuente de manos.
- Equipo protector
Todos los participantes de cada sesión deben usar tapabocas y, claro, si alguien presenta algún síntoma asociado a la COVID-19 será mejor que se abstenga de asistir. Los fotoperiodistas que están en constante movimiento, trabajan en situaciones menos controladas que otros fotógrafos y tienen contacto con muchas personas, corren más riesgo, por lo que deben tomar precauciones extra. Invertir en equipo de protección de grado médico es una gran idea: desde mascarillas N95 hasta ropa resistente a fluidos.
- Seguro de gastos médicos
Una valiosa recomendación general para fotógrafos y profesionales freelance es que nunca está de más invertir en un seguro de gastos médicos; existen muchas aseguradoras que ofrecen distintas formas de pago y precios accesibles, así que investiga e infórmate acerca de cuál te conviene y se adapta a tus necesidades e ingresos.
Sesiones en estudio
Si eres de los fotógrafos que trabajan principalmente en estudio, invierte en un suministro de productos desinfectantes y aerosoles industriales para sanitizar todas las superficies de tu estudio. También asegúrate de minimizar el número de personas presentes en el estudio para que solo sean las necesarias dependiendo de cada trabajo. Por ejemplo, si vas a fotografiar producto o comida, cita solo al ecónomo o director de arte; las demás personas involucradas pueden estar presentes a través de una videollamada.
En locación
Lo más recomendable es hacer sesiones al aire libre y en un ambiente controlado. Durante éstas, además de seguir las recomendaciones generales, ya sea que estés fotografiando modelos o solo la locación, de ser posible, coordina con el cliente que los participantes en la sesión cuenten con algún tipo de certificado médico.
Fotografía de eventos sociales y conciertos
Desafortunadamente, este es el sector de los fotógrafos que estará más afectado por los retos que presentará la “nueva normalidad”. La mayoría de los gobiernos (si son prudentes) prohibirán congregaciones masivas hasta que la pandemia haya sido verdaderamente controlada. Cuando estos eventos vuelvan a ocurrir, probablemente sucederán bajo normas estrictas de sana distancia y, sin duda, los cubrebocas invadirán tus tomas. Al fotografiar este tipo de eventos es básico usar cubrebocas de alto grado de protección (N95), además de la obligada desinfección rutinaria de tu equipo.
Los fotógrafos de eventos sociales y bodas pueden optar por ofrecer servicios de livestream, en especial para aquellos clientes que quieran minimizar el número de invitados a sus eventos. Recuerda: entre más personas congregadas, más altos los riesgos de infección.
Conclusiones:
Con toda la incertidumbre surgida a partir de esta pandemia, la única forma de seguir generando ingresos es trabajando de la manera más segura y protegiéndonos los unos a los otros.
Todas estas reglas son racionales y factibles por lo que las personas involucradas deberían de poder seguirlas sin ningún problema. Por supuesto, las producciones pueden volverse más lentas de lo habitual, pero si seguir estas sugerencias nos augura el comienzo de un retorno seguro a la normalidad, son más que bienvenidas.
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