Tiene algo del mar, mucho del recetario de la abuela y todo de la auténtica cocina vasca. Detrás de cada platillo está la creatividad y la atención a los detalles del chef español Gorka Bátiz.
La preparación de cada platillo comienza desde su origen, pues los pescados y mariscos son diariamente importados de España. El objetivo es ofrecer el sabor más fresco y auténtico en cada bocado, ¡y sí lo consiguen!
Completamente convencido de su concepto, el chef le da su nombre al local: Gorka Altamar. El restaurante se encuentra en Volcán 150, Lomas de Chapultepec, y aunque está rodeado de oficinas corporativas, su ambiente no es tan formal como parece. De hecho, ¡hay terraza para que jueguen los niños!
En la carta hay más de 50 platillos a elegir, pero los que te dejarán mejor sabor de boca son las Alcachofas con queso idiázabal (simplemente exquisitas), los pimientos de piquillo rellenos de bacalao (están bañados en una deliciosa salsa cremosa), los higos rellenos de foie gras (van caramelizados), el Bogavante altamar (cubierto de salsa holandesa y queso de cabra) o los chipirones en su tinta con arroz blanco (imperdibles).
La experiencia gastronómica se potencializa con la calidad del servicio, pues todos los meseros están completamente familiarizados con cada uno de los platillos. De hecho, al momento de abrir la carta y ordenar la comida, ellos son los mejores asesores para pedir lo que deseas, sin frustrarte por no probar lo de la mesa de enfrente.
Pero pausa, antes de pedir de más, checa el menú de postres y cafés: ¡tienen una lista de carajillos impresionante! Todos preparados con Tamburello Coffee Roasters.