Redacción: Central
¿Qué dijiste? ¿Qué los 4 motivos eran la cerveza blanca, la oscura, la abadía y la Gueuze-Lambic? Pues no, además de esta tradicional bebida germana, Alemania te da muchas razones para que lo visites en cualquier época del año.
Aquí te dejamos 4 datitos curiosos que, quizás, no sabías del país y que en cuanto te enteres, seguro te darán ganas de tomar el primer vuelo que te lleve para allá.
1. Es el paraíso del mejor amigo del hombre
Si, así como lo oyes. Los perritos son bienvenidos hasta en el más recóndito lugar de Alemania. Puedes entrar con tu peludo a bares, restaurantes, tiendas, hoteles y hasta en el transporte público.
2. País con mucha conciencia ecológica
¡Reciclaje por todos lados! Mientras caminas por las calles del país, es común encontrar maquinitas recolectoras de botellas.
3. Se mueven en bicicleta
Rothenburg es un pueblito ubicado en el estado de Baviera, ahí todo el mundo anda en bicicleta. Además mientras te paseas por sus calles puedes echar un vistazo a sus hermosas construcciones que te hacen sentir como en un cuento de hadas. No por nada, es considerado uno de los pueblitos más bonitos del mundo.
4. Festejos de Navidad
Se dice que la tradición del árbol de Navidad surgió en Alemania en el siglo XVI. Parece ser que en el siglo VIII, mientras el misionero británico San Bonifacio predicaba un sermón, el día de Navidad, a unos druidas alemanes para convencerles de que el roble no era ni sagrado ni inviolable, el “Apóstol de los alemanes” derribó uno. El árbol al caer fue destrozando todos los arbustos excepto un pequeño abeto. San Bonifacio, interpretó la supervivencia del arbolito como un milagro, concluyendo su sermón: “Lamémosle el árbol del Niño Dios”. Los años siguientes los cristianos celebraron las Navidades plantando abetos, y fue hasta el siglo XVI cuando los alemanes empezaron a decorarlos para festejar la Navidad.
¿Cuándo sale tu vuelo?