Redacción: Central/ Foto: Especial
Su nombre proviene de la lengua náhuatl. Zácatl (zacate) y Tlan (sufijo de lugar). Significa lugar donde abundan los zacates y además como es productor de manzanas, se le conoce como Zacatlán de las Manzanas.
Un ambiente donde se percibe la niebla y el frío, un fenómeno atrayente. Su monumental reloj floral destaca en su centro histórico.
Si eres de buen comer, una sugerencia que te damos es probar algunos alimentos típicos de la región como las chalupas, tlacoyos acompañados de un rico café o un refresco elaborado de las famosas manzanas de la comunidad.
Y para bajar la comida, es imprescindible dar un paseo por la Parroquia de San Pedro y San Pablo, construcción neoclásica del siglo XVII.
Frente a ésta se encuentra el Conjunto Conventual Franciscano, que es el más antiguo de Puebla y sigue funcionando como tal. En su interior podrás observar a detalle sus murales que representan fauna, así como casas de paja, la vida cotidiana antigua y actual del sitio.
Después puedes visitar el Museo de Relojería Alberto Olvera, que fue la que fabricó el famoso reloj del jardín principal.
¿Qué esperas para lanzarte a Zacatlán?