Siempre es muy emocionante viajar a Nueva York, pero sobre todo ir de shopping a las boutiques de belleza, consentirte en los spas y comer en deliciosos restaurantes.
Estos son algunos de mis favoritos:
Boutique de NARS en Soho. Es un must para cualquier amante del maquillaje. Tienen colecciones muy completas y productos exclusivos que sólo puedes conseguir ahí como mi iluminador favorito, el clásico 413 BKLR. EL diseño de la boutique me encanta, es moderno pero con detalles que la hacen acogedora.
Birchbox Boutique. Es el lugar perfecto para comprar “minis” o productos de viaje. Lo padre es que puedes crear tu propio Birchbox, sólo elige las cinco muestras que más te gusten.
Sephora. Es un clásico y por eso no es raro encontrar 15 locales por todo Manhattan. Si quieres estar muy informada y tener las últimas tendencias en belleza, es un parada obligada. Me encanta el rincón de belleza coreana, tienen unas joyas.
The Peninsula Spa. En mi opinión es uno de los más exclusivos en el mundo. Cuenta con fuentes de hielo, sauna, vapor y todo lo necesario para una experiencia placentera. Las cabinas de tratamiento son espectaculares y sus productos son importados de Francia y Alemania.
C.O. Bigelow Apothecaries. Esta tienda ubicada en el barrio de Greenwich. Me gusta porque conservan la tradición de las boticas de antaño. Ahí puedes encontrar desde la crema más rara, hasta accesorios exóticos para el pelo. Su línea de shampoos de menta es de lo mejor que he probado.
Me aseguro de incluir ciertas escapadas a buenos restaurantes y conocer los hot spots del momento.
City Kitchen. Está ubicado en la planta baja del hotel Row NYC y reúne lo mejor de la comida urbana de la ciudad. Ofrece desde donas y café, hasta sushi. No dejen de probar los lobster rolls, y el pita wrap de box.
Para desayunar recomiendo ampliamente el Dominique Ansel Bakery en Soho, aunque deberás esperar para encontrar una mesita. El blooming hot chocolate es para morirse y los cronuts valen mucho la pena. Yo me consentí extra esta vez y pedí un frozen smore: ¡simplemente delicioso!
Si de casualidad consigues una reserva a la hora del brunch del domingo en el brasserie francés Balthazar considérate afortunado, pero si no es así, puedes ir cualquier día de la semana a comer o cenar en este emblemático lugar en Soho. Recomiendo la sopa de cebolla y el risotto con langosta.
Así es como disfruto a tope mi experiencia en Nueva York, comiendo y visitando tiendas de belleza.
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