Nueva Zelanda es un país insular situado en el suroeste del océano Pacífico, conocido por su impresionante diversidad de paisajes naturales que van desde montañas nevadas y fiordos profundos hasta playas vírgenes y colinas verdes. Compuesta por dos islas principales —la Isla Norte y la Isla Sur—, la nación ofrece una mezcla única de cultura maorí y herencia europea, que se refleja en su arte, gastronomía y estilo de vida. Reconocida mundialmente por su enfoque en la sostenibilidad, la hospitalidad cálida de su gente y su amor por la aventura al aire libre, Nueva Zelanda es un destino que inspira tanto tranquilidad como exploración.
Ubicado dramáticamente sobre los acantilados de la Bahía de Hawke, en la Isla Norte de Nueva Zelanda, el Rosewood Cape Kidnappers ofrece una experiencia de hospitalidad donde el lujo se encuentra con la naturaleza salvaje. Esta propiedad, que forma parte de la prestigiosa colección Rosewood Hotels & Resorts, combina elegancia rústica, paisajes impresionantes y una conexión profunda con la tierra y el mar.
El hotel está situado en una finca privada de más de 2 mil 400 hectáreas, que originalmente se utilizaba para la ganadería. Hoy, la propiedad se ha transformado en un santuario de lujo y conservación, sin perder su esencia rural. El nombre “Cape Kidnappers” proviene de un incidente en el siglo XVIII, cuando los maoríes intentaron secuestrar al intérprete del Capitán Cook —un detalle que añade un aire de leyenda a este remoto rincón del mundo.
El diseño del lodge combina piedra, madera y vidrio, integrándose armoniosamente con el paisaje. Las suites –espaciosas y elegantemente decoradas– están distribuidas a lo largo de la finca, ofreciendo vistas panorámicas al océano Pacífico, colinas onduladas o al campo de golf de nivel internacional.
Cada detalle del interior, desde los textiles hasta los materiales, celebra la artesanía local y la sofisticación discreta, típica del estilo “A Sense of Place” que caracteriza a la marca Rosewood.
El restaurante del lodge celebra la riqueza de la región con una cocina basada en productos locales y de estación. Muchos de los ingredientes provienen directamente del huerto de la propiedad o de productores cercanos. El menú cambia a diario y ofrece una experiencia culinaria refinada, maridada con vinos de renombre de la región de Hawke’s Bay, famosa por sus tintos elegantes y blancos aromáticos.
Diseñado por Tom Doak, el campo de golf de Cape Kidnappers está considerado uno de los más espectaculares del planeta. Sus fairways se extienden sobre altos acantilados, con caídas abruptas al mar y vistas que quitan el aliento. Es un destino de culto para golfistas que buscan algo más que un buen juego: una experiencia.
Rosewood Cape Kidnappers también es un actor activo en la conservación ambiental. La finca alberga un santuario de vida silvestre donde se protegen especies nativas en peligro, como el kiwi. Podemos participar en caminatas guiadas para aprender sobre estos esfuerzos, observar aves, o simplemente disfrutar del silencio y la majestuosidad de la naturaleza.
El spa del lodge ofrece tratamientos inspirados en tradiciones maoríes y productos naturales de Nueva Zelanda. Combinado con la paz del entorno, es el lugar perfecto para desconectar, meditar o simplemente descansar mientras el viento del Pacífico susurra entre los acantilados.
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