A través de los años, las terapias alternativas han cobrado relevancia como parte de una estrategia complementaria para el tratamiento de la ansiedad, llegando a ser consideradas como intervenciones de tercera línea en un estudio publicado en The American Journal of Psychiatry .
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la ansiedad es padecida por 264 millones de personas en el mundo, es el componente presente en la mayor parte de los trastornos psicológicos y psicosomáticos.
La ansiedad como amiga o enemiga
En palabras de Miguel Pérez de la Mora, integrante del Instituto de Fisiología Celular (IFC) de la División de Neurociencias de la UNAM , la ansiedad tiene diferentes niveles de prevalencia. En la mayoría de casos inicia en la adolescencia y se acentúa en la etapa más productiva de la vida laboral, social y afectiva.
La ansiedad fisiológica es una reacción normal que tiene el cuerpo ante una anticipación a situaciones en las que nos sentimos amenazados. Incluso, puede ser nuestra amiga porque es una respuesta adaptativa que nos prepara hacia un peligro potencial.
Sin embargo, científicos y psicólogos aún desconocen el punto preciso en el que la ansiedad pasa de ser una reacción normal del cuerpo a aumentar la intensidad de su estímulo para volverse patológica o enemiga silenciosa.
Si bien, existen distintas praxis en torno al control y el cuidado de la ansiedad en pacientes leves a moderados, hay ciertas terapias alternativas que bien podrían funcionar como un tratamiento complementario para reducir y calmar los síntomas que vienen con ella, esto último de acuerdo con el Dr. Ravindran del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Toronto .
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Terapias alternativas que podrían ayudar a calmar la ansiedad
Reiki
Es una terapia de energía vibracional , que se basa en toques ligeros con las manos para re establecer la armonía energética de nuestro cuerpo para buscar una sintonía en el organismo.
En el Reiki, la ansiedad se trata de una interrupción en el flujo de la energía natural del cuerpo, por ello, se tiene como objetivo principal canalizarlo y sanarlo. Además de que es una técnica infalible para favorecer la respiración y la relajación.
Acupuntura
Este tipo de terapia es usualmente recomendada en casos leves de ansiedad .
Las agujas ayudan a la liberación inmediata de endorfinas, produciendo relajación y bienestar desde la primera práctica. No obstante, los efectos a largo plazo se reflejan en mayor medida gracias al número de terapias y al cambio en la rutina de los pacientes.
Aromaterapia
La aromaterapia podría considerarse como un tratamiento natural complementario contra la ansiedad, esta técnica usa las partículas liberadas de los aceites aromáticos para estimular distintas partes del cerebro y reducir de manera paulatina los síntomas de la ansiedad.
Los aceites más usados en aromaterapia contra la ansiedad y el estrés son la lavanda, la bergamota, el nardo, la flor de cananga y el pachulí.
Estas terapias alternativas no equivalen a un tratamiento médico, ni lo sustituyen, recuerda que tu salud es importante, por eso en caso de requerir ayuda, visita a un profesional.
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